INTRODUCTION |
Mónica: ¡Bienvenidos, hola! |
Michelle: Hello, hello! Michelle here. In this lesson, you will learn about commands. |
Mónica: This conversation takes place in an airport. |
Michelle: The conversation is between Fabián and a customs agent. |
Mónica: The speakers are friends, so they will be speaking informally. |
Michelle: Let's listen to the conversation. |
DIALOGUE |
Agente de aduanas: Caballero, abra su maleta por favor. |
Fabián: ehh… Sí, ¡claro! |
Agente de aduanas: Me puede explicar ¿qué es este polvito blanco? |
Fabián: Señora, es talco para mis pies. |
Agente de aduanas: ¿Ahora me va a decir que sus pies huelen feo? |
Fabián: Señora, por favor baje la voz, todos en el aeropuerto la escucharon. |
Agente de aduanas: A mí no me calle, ¡¡¡¡respete a la autoridad!!!! |
Fabián: Pero amiga, tranquila, no quiero ser irrespetuoso. |
And now, with the translation. |
Ahora incluimos la traducción. |
Agente de aduanas: Caballero, abra su maleta por favor. |
security officer: Gentleman, open your suitcase, please. |
Fabián: ehh… Sí, ¡claro! |
Fabián: Ummm…Yes, of course! |
Agente de aduanas: Me puede explicar ¿qué es este polvito blanco? |
security officer: Can you explain what this white powder is? |
Fabián: Señora, es talco para mis pies. |
Fabián: Ma'am, it's talc for my feet. |
Agente de aduanas: ¿Ahora me va a decir que sus pies huelen feo? |
security officer: Now you're gonna tell me that your feet stink? |
Fabián: Señora, por favor baje la voz, todos en el aeropuerto la escucharon. |
Fabián: Ma'am, keep your voice down; everyone in the airport heard you. |
Agente de aduanas: A mí no me calle, ¡¡¡¡respete a la autoridad!!!! |
security officer: Don't tell me to be quiet! Respect the authority! |
Fabián: Pero amiga, tranquila, no quiero ser irrespetuoso. |
Fabián: But buddy, relax; I don't want to be disrespectful. |
POST CONVERSATION BANTER |
Michelle: ¡Ay Mónica! ¡Vieras que ayer vi una cosa rarísima! |
Mónica: ¿Qué? |
Michelle: Okey, es que estaba viendo tele… |
Mónica: Mmm-hmm.… |
Michelle: Y… vi que estaban dando a Shrek. |
Mónica: Ajá. |
Michelle: Y yo pensé: “¡Ahh! Perfecto, la voz de Mike Myers, súper vacilón! |
Mónica: ¡Oh! |
Michelle: ¡Pero estaba en español! |
Mónica: ¡Oh…! |
Michelle: Sí, para mí fue algo tan raro, y también, viendo los Simpsons y todo eso, que tienen voces diferentes, pero de ahí. ¡Es lógico! |
Mónica: Sí… Pero a veces, por ejemplo para las películas sí utilizan como a personajes reconocidos, y casi que hacen una traducción parecida, pero lastimosamente no utilizan las mismas palabras, entonces, a veces que las imágenes versus lo que están diciendo, no hacen el sentido tan perfecto como lo hace la versión original en inglés. |
Michelle: Mmm-hmm. Y entonces, la gente de Estados Unidos que está acostumbrada a escuchar la voz de Shrek, que sea, que es Mike Myers, ahora, si vienen acá, ven una versión diferente y la gente latinoamericana entonces ya está acostumbrada a otro locutor, que le esté dando voz a una imagen súper reconocida por todo el mundo. |
Mónica: Lo que hacen con las dos películas es que la gente le gusta ver las dos versiones a veces. |
Michelle: Sí, es cierto. Pero igual, sigue siendo raro. |
Mónica: Sí. |
VOCABULARY |
Michelle: Let's look at the vocabulary for this lesson. |
Mónica: Caballero. |
Michelle: Sir, gentleman. |
Mónica: Ca-ba-lle-ro, caballero. |
Mónica: Maleta. |
Michelle: Suitcase, luggage. |
Mónica: Ma-let-a, maleta. |
Mónica: Polvito. |
Michelle: Powder. |
Mónica: Pol-vi-to, polvito. |
Mónica: Talco. |
Michelle: Talc. |
Mónica: Tal-co, talco. |
Mónica: Oler. |
Michelle: To smell. |
Mónica: O-ler, oler. |
Mónica: Bajar. |
Michelle: To lower, diminish. |
Mónica: Ba-jar, bajar. |
Mónica: Irrespetuoso, irrespetuosa. |
Michelle: Disrespectful. |
Mónica: I-rres-pe-tuo-so, i-rres-pe-tuo-sa. Irrespetuoso, irrespetuosa. |
VOCAB AND PHRASE USAGE |
Mónica: Empecemos estudiando el vocabulario usado en esta lección. |
Michelle: ¡Tus pedidos, son mis órdenes! |
Mónica: Sí, señorita. |
Michelle: Bueno. La primera palabra de hoy es un sustantivo masculino: caballero. |
Mónica: Literalmente hace referencia al hombre que cabalga, o va a caballo. |
Michelle: Un caballero es un hombre que pertenece a una orden de caballería. |
Mónica: O un hombre que se porta con nobleza y generosidad. |
Michelle: Pero en la conversación de hoy escuchamos al agente de aduanas decir: “Caballero, abra su maleta, por favor”. |
Mónica: En este caso es como decir “señor”. No es más que un término de cortesía. |
Michelle: Por ejemplo, en un contexto formal, sería: “Disculpe, caballero. ¿Sabría usted dónde se ubica la oficina del señor Gómez?”. |
Mónica: Sí, o sea, es igual a decir “disculpe, señor”. |
Michelle: Además, en este mismo sentido podemos usar el sustantivo femenino caballera. |
Mónica: Sí, pero no podemos sustituir la palabra señor o señora por caballero o caballera cuando van antepuesto a un nombre, es decir: no podemos decir “caballera Hernández”, pero sí podemos decir “señora Hernández”. |
Michelle: Ajá, correcto. Bueno, continuemos. |
Mónica: Enseguida estudiaremos un sustantivo femenino: maleta. |
Michelle: En la conversación de hoy, el agente de aduanas le pide a Fabián que abra su maleta. |
Mónica: Por lo general, una maleta es una especie de caja o cofre pequeño de cuero, lona u otras materias, pero sirve para guardar en viajes o traslados, ropa y otras cosas que se pueden llevar a mano. |
Michelle: Por ejemplo: “¿Dónde está mi maleta? ¡Necesito algunos documentos importantísimos que había guardado en ella!”. |
Mónica: En Chile y Venezuela se dice maleta por la maletera de un auto. |
Michelle: Mientras que en Cuba, maleta puede emplearse como cartera que usan los niños para llevar los libros a la escuela. |
Mónica: Y en el Perú, maleta puede referirse a la espalda de una persona. |
Michelle: Y en Argentina y Uruguay, se usa la locución verbal “andar como maleta de loco”, que quiere decir no tener objetivo claro, no saber qué se quiere o se pretende. |
Mónica: Como Michelle. ¡Cuántas distintas acepciones! |
Michelle: ¡Así es el español! |
Mónica: Continuando… |
Michelle: Bueno, enseguida estudiaremos un sustantivo masculino que se encuentra en forma diminutiva: polvito. |
Mónica: En la conversación de hoy, el agente de aduanas dice: “¿Me puede explicar qué es este polvito blanco?”. ¡Hmm...! |
Michelle: Bueno. Proviene del sustantivo polvo, que se refiere a la parte más menuda y deshecha de la tierra muy seca, que con cualquier movimiento se levanta en el aire. |
Mónica: También es el residuo que queda de otras cosas sólidas, moliéndolas hasta reducirlas a partes muy menudas. |
Michelle: En el lenguaje de droga, muchas veces se refiere a heroína. |
Mónica: Sí. Pongamos otro ejemplo: “¡El piso está lleno de polvo, hay que barrerlo ya mismo!”. |
Michelle: Además, la frase verbal “estar alguien hecho polvo”, significa hallarse sumamente abatido por las adversidades, las preocupaciones, o la falta de salud. |
Mónica: Pues, si yo digo “estoy hecha polvo”, quiere decir que estoy cansadísima por todo lo que me ha sucedido. |
Michelle: Sí… Y bueno... okey, no, no, no, mejor no digo nada. ¡Je je! |
Mónica: ¡Pobrecita! |
Michelle: Si hacemos a alguien polvo, lo aniquilamos o lo vencemos en una contienda. |
Mónica: Okey, muy bien. Continuando… |
Michelle: La próxima palabra que estudiaremos es un sustantivo masculino: talco. |
Mónica: En la conversación de hoy escuchamos a Fabián decir: “Señora, ¡es talco para mis pies!” |
Michelle: Es un mineral muy difícil de fundir, de textura laminar muy suave al tacto. Lustroso, tan blando que se raya con la uña, y de color generalmente verdoso. Es un silicato de magnesia. |
Mónica: ¡Wow! Pero… |
Michelle: ¡Je je je je! |
Mónica: Je... Pero en el contexto de la conversación, no estamos hablando del mineral, sino del polvo de este mineral, usado en dermatología para el cuidado de pieles delicadas. |
Michelle: Ajá, a ver… ¿me das otro ejemplo? |
Mónica: Sí, pero… diferente. |
Michelle: Okey, me parece. |
Mónica: Okey. Por ejemplo: “Empecé a echarme talco en el torso cuando hace mucho calor, porque me salía un sarpullido”. |
Michelle: ¡Ay, que feo! |
Mónica: Ay sí, pero es un… un ejemplo. |
Michelle: Un comentario más: en la jerga de algunos países, sé que por lo menos se hace en el Perú, la gente tiende a decir: “¿qué talco?”, en vez de “¿qué tal?”, para diferenciar o hacerse graciosa. |
Mónica: ¡Ah, sí! |
Michelle: Sí, sí, sí, sí… Eso pasa, muchísimas gracias por la introspectiva. ¡Ay no! Y también conozco un muchacho de Honduras que dice “¿Qué pedos?”. |
Mónica: ...Okey. |
Michelle: ¡Ja ja ja! |
Mónica: Aquí termina. |
Michelle: ¡Ah! Bueno, okey. Sigamos, tenés razón. |
Mónica: De nancy. |
Michelle: ¡Ja ja ja ja! |
Mónica: Es otro ejemplo. Okey, enseguida estudiaremos un verbo de segunda conjugación: oler. |
Michelle: Bueno. Cuando olemos, percibimos o identificamos los olores. |
Mónica: Si, en el contexto de la conversación, la agente de aduanas le dice a Fabián: “¿Ahora me van a decir que sus pies huelen feo?”. |
Michelle: Así que podemos formar ejemplos como “La lasagna que hiciste huele riquísima”, o “Huele raro aquí, ¿qué estás cocinando?”. |
Mónica: Todavía nada. Es más: cuando hacemos comparaciones con el verbo oler, tenemos que usar la preposición “a”. Fíjense en la siguiente estructura: el verbo oler, conjugado, más la preposición “a”, más sustantivo. |
Michelle: Por ejemplo, “Hueles a lavanda. ¿Qué crema te has echado?”. |
Mónica: O, “Tu pelo huele a humo. ¿Por qué no te bañas?”. |
Michelle: Muy bien. Además podemos mencionar el adjetivo oloroso, olorosa, que se refiere a lo que exhala de sí fragancia. |
Mónica: Por ejemplo: “Creo que el jazmín es una de las flores más olorosas del mundo”. |
Michelle: Uy, sí. También se le dice oloroso a un vino de jerez de color dorado oscuro, y mucho aroma, de dieciocho a veinte grados y que, al envejecer, puede llegar a veinticuatro o veinticinco. |
Michelle: Okey, bueno. Nos faltan dos palabras. |
Mónica: Continuamos. |
Michelle: Buena idea. Ahora estudiaremos un verbo de primera conjugación: bajar. |
Mónica: Fabián le pide a la agente de aduanas: “Señora, por favor baje la voz. Todos en el aeropuerto la escucharon.” |
Michelle: Bueno, en este sentido bajar quiere decir disminuir. |
Mónica: ¡Claro! O sea, la agente hubiese dicho: “¡No hable tan alto!”, que es prácticamente lo mismo que “baje la voz”. |
Michelle: Por ejemplo: “¿Te importa si bajo el volumen del televisor?” |
Mónica: Bien, ahora una palabra relacionada al verbo bajar. Es el sustantivo femenino bajada. Aparte de significar la acción de bajar, una bajada es un camino o una senda por donde se baja desde alguna parte. |
Michelle: Como en “Tomamos la bajada para llegar a la playa”. |
Mónica: El término contrario sería subida. |
Michelle: Uy, qué rico estar en la playa ahora… Muy bien, esto nos lleva a la última palabra de hoy, que es un adjetivo: irrespetuoso. Irrespetuosa. |
Mónica: No es nada difícil. Simplemente significa: sin respeto, no respetuoso. Quien falta de respeto. |
Michelle: Pidiendo disculpas al agente, Fabián dice: “Pero amiga, ¡tranquila! No quiero ser irrespetuoso”. |
Mónica: Y otro ejemplo: “¡Qué irrespetuosa es la chica esa, no cree en nadie!”. |
Michelle: El adjetivo irrespetuoso se deriva del sustantivo respeto, y este del verbo respetar. |
Mónica: Como en “respeta a tus mayores”. |
Michelle: Muy bien. Creo que hemos llegado al final de nuestra lista de vocabulario de hoy. |
Mónica: ¡Ah…! |
Michelle: Sí, yo sé, muy triste. |
GRAMMAR |
Mónica: Okey, ya llegó el momento de estudiar la gramática usada en la conversación de hoy. |
Michelle: ¡Ay, Moni! ¿Y en qué nos vamos a enfocar hoy? |
Mónica: ¡En los mandatos, Michelle! |
Michelle: ¡Ah, okey…! |
Mónica: Sí. |
Michelle: Es un tema muy importante, porque en español lo usamos habitualmente. |
Mónica: ¡Claro! Y para quienes no sepan, que yo use un mandato no significa que sea una mandona. |
Michelle: ¡Pero claro! Pero… sea igual, creo que eso no… |
Mónica: No significa. |
Michelle: No, no, yo sé, pero igual, hmm… bueno. |
Mónica: ¿No? |
Michelle: Bueno, no no. Okey. Sí, no, no, tenés razón, ¡je! |
Mónica: … |
Michelle: ¡Vacilando, vacilando! |
Mónica: Hmm, hmm, hmm… |
Michelle: Cuando usamos mandatos, expresamos un deseo de que algo suceda o no suceda. |
Mónica: Ahora, estudiamos algo de la formación. |
Michelle: Pues para los verbos de primera conjugación, como respetar, tenemos las formas: respeta tú, respetá vos, respete usted, respetad vosotros, y respeten ustedes. |
Mónica: Fíjense que las terminaciones para todas las formas, salvo la de vos y la de vosotros, son las mismas que usamos al conjugar los verbos en tiempo presente de modo subjuntivo. |
Michelle: Y recuerda que así funciona para todos los verbos de primera conjugación. |
Mónica: Okey, yo te podría decir: “Llámame cuando llegues”. |
Michelle: Y yo te podría responder: “Envíame tu número telefónico”. |
Mónica: O, si fueras mi jefa… ¿hmm? Te diría: “¡Cuente conmigo, señora!”. |
Michelle: Y yo te podría responder: “Prepara el informe para la reunión”. |
Mónica: O si empleáramos el voseo, te diría: “Pasa por mi casa a las diez”. |
Michelle: Y te respondería: “Espérame hasta las once”. |
Mónica: Y si estuviéramos en España, y hablara con dos o más amigos, diría “Enviadme vuestros correos electrónicos”. |
Michelle: Bueno, okey. Muy bien, creo que ya… |
Mónica: Y sí. |
Michelle: ¡Je je! Ahora, pasamos a los verbos de la segunda y tercera conjugación. |
Mónica: Estamos hablando de aquellos que teminan en -er, o -ir. |
Michelle: Lo importante es que se aplica la misma regla con la que mencionamos antes. |
Mónica: Repito: las terminaciones para todas las formas, salvo la de vos y la de vosotros, son las mismas que usamos al conjugar los verbos en tiempo presente de modo subjuntivo. |
Michelle: Pues para un verbo como comer, tenemos las formas: come tú, comé vos, coma usted, comed vosotros, y coman ustedes. |
Mónica: A ver algunos ejemplos. |
Michelle: “¡Adelante, come antes de que se enfríe la sopa!”. |
Mónica: ¡Mmm! ¡Qué rico! |
Michelle: Ay, sí. |
Mónica: O hablando con múltiples españoles: “¡Comed! Ya, porque vosotros tenéis que salir en quince minutos”. |
Michelle: O si empleáramos el voseo, diríamos: “¡Pero comé che, como no vas a comer si tenés hambre!”. |
Mónica: Muy bien, ya vamos a algunos ejemplos con los verbos de tercera conjugación. |
Michelle: Okey. Como por ejemplo el verbo transferir. |
Mónica: Diríamos: “¡Oye hermana, transfiere la plata ya que estoy misia!”. |
Michelle: Y en los negocios: “Transfiera usted el dinero a la cuenta indicada en la factura”. |
Mónica: O con el voseo: “¡Transferí la plata, si vos no lo hacés estoy frita!”. |
Michelle: Y en España sería algo como: “Mamá, papá, transferid el dinero a mi cuenta corriente”. |
Mónica: Ah… |
Michelle: Ah… |
Mónica: Mami, papi… |
Michelle: Sí, mami papi, mami papi paga. |
Mónica: ¡Mmm-m! Muy bien, ahora obviamente hay muchas irregularidades con respecto a la formación de los mandatos, pero no queda tiempo suficiente para abarcar ese tema en esta lección. |
Michelle: Esperamos que hayan aprendido algo nuevo con nosotras, y que sigan escuchando. |
Mónica: Bueno… |
Outro
|
Michelle: ¡Chau chau! |
Mónica: ¡Hasta luego, chau! ¡Hasta la próxima! |
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